18 abril 2015

¿Por qué no “Podemos” confluir en Rivas?

Rivas --y bien lo sabe el PP que intenta desde su atalaya dispararnos a cañonazos--, es y ha sido modelo de ciudad diferente, donde ha habido una apuesta real por los servicios públicos (cultura, juventud, deporte, etc.), por la solidaridad (memoria histórica, cooperación internacional, cambio climático, etc.). Un ejemplo de la izquierda, una referencia para muchos municipios progresistas.

Todo eso no quiere decir que Rivas sea una ciudad perfecta y que IU, después de 24 años, lo haya hecho todo bien, pero se puede afirmar que el balance es positivo. Al menos así lo han considerado los vecinos hasta las últimas elecciones donde volvieron a dar su confianza a Izquierda Unida, de forma aplastante.

En el panorama nacional, el partido Podemos ha irrumpido hasta hacer temblar los cimientos del bipartidismo, de la falta de participación, ha sido capaz de ilusionar y de hacer creer a gran parte del electorado español en una nueva forma de hacer política. Algo en lo que IU tampoco ha acertado, incapaz de evitar ser el pepito grillo de la política. La plana mayor de Podemos ha sido capaz de insuflar una nueva posibilidad real de cambio.

Pero Podemos sabe que en el calor de ese despertar político puede haber quien quiera cobrarse, de forma oportunista, intereses contrarios a su intención de regeneración, participación y nuevas formas políticas. De ahí que la decisión de no concurrir a las elecciones municipales, como tal, es porque saben que su marca puede ser un coladero para personajes con ambición personal. La apuesta de ir a las municipales en procesos plurales donde encontrarse con otros colectivos y partidos es un acierto. Se trata de dar la palabra y la acción a los ciudadanos para que ganen las instituciones que el bipartidismo les ha robado.

Sin embargo, en Rivas, no hay instituciones que ganar, ni el PSOE –desarmado y en constante retroceso— y el PP –interesado en combatir a IU de Rivas a cañonazos desde Génova—  han sido incapaces de conseguir el beneplácito de la ciudadanía ripense. En Rivas hay que defender lo conquistado, y hacerlo entre todos los que creen en un proyecto progresista y validado por los ciudadanos. No se trata de enfrentarse a Izquierda Unida, sino de desarrollar un proceso en el que la incluya, de seguir construyendo una ciudad diferente.

Esa es la línea a la que apunta una candidatura fruto de un proceso de debate ciudadano participativo. Una coalición –similar a la liderada por Ada Colau en Barcelona— en la que participan IU, Equo y un partido instrumental creado por vecinos activistas de diversos colectivos: “Somos Rivas” (por cierto, a título personal también participan militantes de Podemos). Frente a ello, es inexplicable la actitud del círculo Podemos de Rivas que, haciendo caso omiso a las decisiones de sus órganos, han creado una marca blanca: “Rivas Puede”, para saltarse la decisión de su partido a nivel estatal de participar solamente en procesos unitarios de convergencia.

Somos Rivas

O sea, están usando una estructura de su partido para crear otro, lo que –así parece que se lo han hecho ver incluso desde la dirección regional de su partido— les han recriminado y hecho cambiar el logo, puesto que era calcado al de Podemos.

Lo sorprendente es que algunos de sus miembros reconozcan –lo han escrito en redes sociales y a mí me lo ha reconocido un miembro destacado— que la razón de no haberse adherido a “Somos Rivas” no es otra sino que IU tiene demasiado prestigio en Rivas y sus dirigentes son muy conocidos. Se ve que según Podemos Rivas lo importante es competir contra Izquierda Unida, Equo y otros sectores sociales, no unirse y entre todos poder mejorar la gestión municipal.

Y es que algunos de sus insignes impulsores, a los que conozco de militancias pasadas, llegan a calificar de neoliberales las políticas que ha impulsado IU desde el ayuntamiento de Rivas. Todo ello empleando prácticas impropias de la nueva forma de hacer política que propugnan. Sin ir más lejos, yo mismo he recibido en mi correo personal, una convocatoria de Podemos invitándome a participar en “Rivas Puede”, sin que haya dado autorización para que utilizaran mis datos personales. Lo que me hace pensar que Podemos de Rivas está usando contactos recabados en otras iniciativas o plataformas para engordar su base de datos, algo que vulnera la ley de protección de datos. Habiéndoselo hecho saber, ni tan siquiera se han dignado contestarme para reconocer su error. Por cierto, que ya he tomado las medidas pertinentes.

Es una pena que el cortoplacismo, la ceguera del momento, la ambición  inconfesada o el sectarismo de miembros de Podemos Rivas, que difícilmente pueden identificarse en su perfil político, con el despertar ilusionante que ha supuesto su partido en el panorama político nacional, supongan una traba para que todas las fuerzas de izquierdas y la ciudadanía indignada se entiendan en un espacio unitario, y peor aún, que todo ello pueda poner en riesgo lo que Rivas significa en nuestra vida cotidiana como vecinos, y en el imaginario progresista de un país que necesita referentes como el de esta ciudad. Por eso yo lo tengo claro: experimentos, con gaseosa; mejor los procesos sinceros y generosos en los que se suman fuerzas.

Salud y República

P.D. Por cierto, la Comisión de Garantías Democráticas de Podemos ha dictaminado una resolución contra el círculo de Podemos de Rivas por haberse saltado las normas emanadas del Partido Podemos, habiendo creado un partido paralelo y de falsa unidad democrática, además de haberlo hecho con menos militantes de los requeridos. Esta comisión de garantías solicita abrir expediente sancionador a todas las personas implicadas, en concreto al Consejo Ciudadano de Rivas y a su Secretario General por supuestas infracciones tipificadas en los Estatutos de Podemos.

Veremos cómo termina este contencioso que no hace sino demostrar la prepotencia y la actitud soberbia de este Podemos local, cuya única pretensión es colocarse como sea en el ayuntamiento –olvidándose de la Unidad Popular--, aunque sea en contra de los métodos y valores que su partido dice propugnar.

2 comentarios:

Antonio Flórez dijo...

Don Rafael, me está queriendo jugar usted en plan fútbol italiano clásico: con el catenaccio. Es decir, muy a la defensiva y en plan casi numantino, y a ver si como poco sacamos un empate a cero. Y esto, en un atlético de pura cepa como usted (al menos con este Atlético de ahora), es sorprendente.

Varias de las premisas que usa usted en esta entrada son discutibles, y la principal de ellas es esa ligereza con la que valora usted la gestión municipal en los últimos años. No voy a negar que, efectivamente, hay muchísimas más cosas rescatables en Rvas de las que se pueden encontrar en casi ningún lado. Pero lo bueno no es enemigo de lo mejor, y si una muy significativa cantidad de gente ha visto con malos ojos varios aspectos importantes de la gestión en los últimos años, no es como para condenarles como agentes de ningún contubernio al servicio del PP, sino como gente normal a la que, simplemente, no le han gustado varias cosas.

Aun a sabiendas de que las pasadas elecciones europeas no son un baremo para medir las preferencias y disgustos en lo municipal, lo cierto es que algo barrunto yo que significó aquella sorprendente victoria de un partido recién nacido. Podemos Rivas no se apunta a la ligera ese tanto, porque a pesar de ser uno de los primeros círculos de Podemos nacidos en España (quizá de los cinco o diez primeros), no tenemos la soberbia de creer que la gente votó a Podemos por nuestra cara bonita. Pero lo que sí es cierto es que no votó a otras opciones mucho más conocidas y que, de haber despertado mayores simpatías, podrían haber recogido ese voto. Pero no lo hicieron, y ese es el detalle que me da a mí para pensar que ya entonces se barruntaba esa desafección significativa hacia otras fuerzas. Y en concreto, hacia IU, que bien hubiera podido ser la que recogiera una simpatía que no recogió.

Ahora estamos ante unas elecciones en las que hay dos candidaturas que, creo adivinar, usted piensa que deberían estar juntas. Y también me parece ver que usted piensa que si no lo están es porque Podemos Rivas no es tan buena gente como Podemos a otros niveles, sino que tienen en sus filas a esos indeseables contra los que la cúpula de Podemos alertaba cuando decía que mejor no presentarse con la propia marca a las municipales.

Y fíjese que estoy por jugarme el sueldo que he cobrado durante el último año a que si se pone usted a señalar nombres de la lista de Rivas Puede, no va a conseguir encontrar a ninguno de esos indeseables.

En fin, yo, no sé por qué, cuando leo tantas y tan esforzadas críticas a otra candidatura basándose en los problemas que una de las fuerzas que la componen está teniendo a nivel interno (una, que no la única), me da por recelar. Si la misma "línea editorial" se tuviese que aplicar a Izquierda Unida habría para empezar y no terminar, porque no sé si la gente tiene muy claro en este momento quién está dónde y hasta cuándo. Y por qué motivos, además.

Volviendo al símil futbolístico del comienzo, abra usted las líneas defensivas y coloque a más centrocampistas y delanteros en juego. Que igual el partido es más bonito y hay más goles.

Un fuerte abrazo

RGAlmazán dijo...

Amigo Antonio, gracias por su tono cordial en las apreciaciones que me hace, ya sabe usted que le aprecio y le tengo por un buen tipo.
Respecto a lo que dice, pues bueno parece normal que tengamos dispares puntos de vista, por lo que yo quisiera hablar de los hechos, al menos de cómo lo veo yo.
Que haya escrito esta entrada se debe a mi decepción, puesto que yo creía que el objetivo de Podemos era unir fuerzas para llevar a cabo políticas distintas a las que llevan los partidos del bipartidismo. Sin embargo, en el caso de Rivas, yo entiendo que era necesario esa unión antes de las elecciones --espero que la haya después si fuera necesario para vencer al maligno--, puesto que como usted sabe no es lo mismo, por la ley D'Hont, por ejemplo, sacar un 45% en una candidatura única --lo que casi segura le daría la mayoría absoluta--, que sacar un 30 y un 15%, en dos, que las dejaría por debajo de esa mayoría.
No seré yo quién no crea que es mejorable la gestión municipal, pero también sabe usted, que en muchas cuestiones este municipio ha sido modelo, por lo que parece razonable que se empujara lo bueno que se ha hecho y se tratara de corregir los errores cometidos con la ayuda de Podemos.
Lo de las europeas, D. Antonio, sabe usted que I.U. nunca ha ganado en ninguna elección que no fuera municipal, de hecho el aumento de votos de IU Rivas en las europeas fue muy fuerte. O sea que "esa desafección" de la que habla, la tiene IU Rivas desde hace treinta años en todas las elecciones menos en las municipales, donde a pesar de ser tercera fuerza en las generales y las europeas, termina siendo la ganadora con gran ventaja (pregúnteselo a los del PSOE local que siempre ganaban en las europeas, generales y de la comunidad, y sin embargo quedaban segundos o terceros en las locales).
Y sí, D. Antonio, hay gente en Podemos Rivas --pocos que yo sepa, pero algunos han coincidido conmigo en I.U.-- que tienen odio visceral a IU, ¡que le vamos a hacer! Y ¡ojo¡ no hablo de indeseables sino de gente que no está por la labor de confluir, simplemente, de ninguna manera.
Por otra parte, alguno de su grupo me dijo a mí, personalmente, que no querían confluir porque los nombres de IU eran más conocidos y les ganaríamos en las primarias, ¿qué le parece?
Por cierto, de los problemas internos, ya he manifestado mi opinión tanto en los que se refieren a Rivas y también a los de Madrid, y creo haberlo hecho claramente.
Sin embargo, no me cuenta usted nada del contencioso que tienen ustedes con la comisión de garantías, por graves irregularidades.

En fin, a pesar de estas discrepancias, estoy convencido de que nos encontraremos en el camino. Espero y deseo que le vaya bien a la Izquierda en nuestro pueblo y, por cierto, sólo en una cosa le deseo que le vaya mal: Mañana en el Bernabeu.

Salud y República