03 febrero 2008

La literatura como terapia de la política (XIX)

De nuevo Blanca ha acertado. La hoguera de las vanidades es una novela de Tom Wolfe, un periodista metido a escritor, y se nota. Una novela muy bien escrita y con una agilidad que engancha. Tuvo un éxito poco común y fue llevada al cine, desgraciadamente la película, como ocurre a menudo, no estuvo a la altura de la novela.

Un asesor financiero de éxito se pierde por el Bronx y empieza a sufrir una serie de calamidades de todo tipo y demostrar que el destino fatal puede venir en cualquier momento. Todo ello contado con fluidez y con humor, desde la crítica social.

La leí a finales de los ochenta y me pareció, a pesar de ser larga, una novela fácil de leer, divertida y bien escrita. Muy recomendable. Un buen descubrimiento.

Y pasamos al fragmento de hoy:

--Es verdad que no prestamos servidumbre a gobiernos, partidos, ejércitos y demás instituciones visibles, que son todas hijastras de Satán –decía con dulzura--, que no juramos fidelidad a nuestro trapo con colorines, ni vestimos uniformes, porque no nos engatusan los oropeles ni los disfraces y que no aceptamos los injertos de piel, o de sangre, porque lo que Dios hizo la ciencia no lo deshará. Pero nada de eso quiere decir que no cumplamos nuestras obligaciones. Señor juez estoy a sus órdenes para lo que se le ofrezca y sepa que ni aun con motivos le faltaría el respeto.
Hablaba de manera pausada, como para felicitar la tarea del secretario, que iba acompañando con música mecanográfica su perorata. El juez le agradeció sus amables propósitos, le hizo saber que respetaba todas las ideas y creencias, muy en especial las religiosas, y se permitió recordarle que no estaba detenido por las que profesaba sino bajo acusación de haber golpeado y violentado a una menor.

Pues lo dicho, llega el momento de que encuentren título y autor.

Salud y República

Actualización a las 21:50. 1ª Pista: El autor es iberoamericano y pertenece a la corriente del realismo mágico.
Actualización a las 8:00 del 4/2. 2ª Pista: El título de la novela hace referencia a una relación familiar y es autobiográfica

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Onetti?

RGAlmazán dijo...

No, D. Vilos. No es Onetti. Pero su intento tiene cierto olfato.

Salud y República

Blanca dijo...

¿El amor en los tiempos del cólera? ¿García Márquez?

RGAlmazán dijo...

No, Blanca no es de García Márquez.
Voy a poner una nueva pista ahora. Seguro que ésta será la definitiva.

Salud y República

Curro Corrales dijo...

Elogio de la madrastra, de Vargas Llosa?

RGAlmazán dijo...

Mi querido Curro, te vas acercando, pero no es "Elogio..."

Salud y República

Curro Corrales dijo...

Bah, pues por simple descarte bibliográfico y no por olfato lector, me atrevo a decir: "La tía Julia y el escribidor"... pué ser?

Blanca dijo...

Lo que diga Curro...

RGAlmazán dijo...

Pues sí, Curro. Ahora sí, aunque haya sido por descarte. Reconozco que el fragmento elegido era difícil. Pues el nombre de alguno de los protagonistas o el de la ciuad de Lima hubieran dado una pista definitiva en el texto.

Blanca y Vilos fueron cercando la respuesta.

Ha sido un acierto muy compartido.

Salud y República