30 diciembre 2007

La literatura como terapia de la política (XIV)

Pues sí, después de casi dos días y varias pistas D. Vilos, el ilustrado, dio con el autor y el título. Su acierto se ha demorado seguramente por el fragmento escogido que voluntariamente fue rebuscado para no denotar sino generalidades.

Mahfuz es el escritor de Egipto, quizas del Norte de Africa, más conocido. Fue premio Nobel y es un autor muy citado y admirado por todo el mundo. Murió mayor, seguramente su muerte fue acelerada por un atentado que le pertrecharon esos fanáticos islámicos, hiriéndole gravemente.

El callejón de los milagros, probablemente, es su obra más conocida. Forma parte de la Pentalogía realista que describe las vivencias de la pequeña burguesía y las clases populares de El Cairo, su ciudad. El autor escribe en tercera persona distanciándose de la acción, intentando ser neutral y mero instrumento de lo que ocurre. Su principal foco se dirige a los personajes por encima del escenario en el que se enmarcan, utilizando de fondo la segunda guerra mundial y los problemas sociales de su país durante la época.

La leí hace ya mucho tiempo y me llamó la atención la simplicidad de las cosas, su realismo y la forma de integrar distintos relatos en un único hilo conductor. Fue la primera novela del autor que leí y desde entonces le he seguido en toda su obra.

Y ahora vamos con el fragmento de esta semana:

La sangre llama a la sangre, la sangre es el eco de la sangre, la sombra de la sangre y su rastro, jamás ha habido un criminal que se sintiese satisfecho con un solo crimen y a veces en el aire flota como un aroma criminal que a más de uno embriaga, no, tú no tienes por qué ser forzosamente criminal pero es muy probable que no puedas sustraerte a los viejos placeres, pregunta por el sabor de la sangre, nadie te responderá, el sabor de la sangre es una sensación que se guarda tan celosamente como un secreto de alcoba, casi nadie habla de sus cochinadas de alcoba pero casi nadie se ve libre de sus propias cochinadas de alcoba, casi nadie es capaz de estrangularlas, el hombre teme la verdad pero no se refugia en la mentira sino en la farsa…

Pues nada, ahí queda eso… que Uds. lo acierten.

Salud y República

4 comentarios:

Martine dijo...

Con trampas lo confieso...pero no será la descripción de la espiral de la violencia en "San Camilo 36"?

Ahora sin trampas, tengo entre las manos otro libro del premio Nobel egipcio Naguib Mahfuz "Mañana de rosas", es un honor compartir contigo la lectura de este escritor.

Un abrazo Kabila!
¡Inmejorable 2008!de todo corazón..

RGAlmazán dijo...

Amiga Selma, no sé qué trampas has hecho pero te han llevado a acertarlo.
Al menos, prométeme que no las harás en 2008.

Gracias por participar y te deseo lo mejor para el año que viene.

Salud y República

Martine dijo...

Lo que prometo solemnemente y que he hecho siempre desde que tengo edad para hacerlo es VOTAR...Y en 2008 lo haré, te lo prometo por Zeus!

Un abrazo muy muy fuerte!

Anónimo dijo...

"Joe" ¡Qué velocidad, Selma!, no me has permitido ni intentarlo. Muy bien.