25 enero 2007

La derecha judicial: Gómez Bermúdez

Pues claro que tiene que haber división de poderes. Y además respetarla. Todo el mundo se la lía con papel de fumar. Que si la independencia de los tres poderes, que si hay que dejar trabajar a los jueces, que si no se les puede intimidar. Todo eso está muy bien. No soy yo quien lo pone en duda. Ahora bien dicho esto ¿se puede criticar a los jueces? ¿hablamos de jueces o de dioses?

En primer lugar, todos sabemos los sesgos ideológicos de los jueces. La judicatura, se sabe por su pertenencia a las distintas asociaciones, está compuesta por un 60% de jueces conservadores, un 25% de jueces progresistas y un 15% que ni fu ni fa. Y, naturalmente, todos los órganos representativos del poder judicial tienen composiciones de acuerdo a las de colectivo. Así que nos encontramos que la gran mayoría de los jueces son de derecha. Sumemos a esto que los chicos del PP les intentan marcar el camino constantemente –ayer, sin ir más lejos, María Sanjuán ha sido muy clara en el caso de De Juana Chaos.

La última decisión del Poder Judicial –por cierto, en funciones— ha sido la de nombrar al juez Javier Gómez Bermúdez, por tercera vez, presidente de la Sala de lo Penal en la Audiencia Nacional. Dicho magistrado es uno más de esos jueces conservadores que tienen muy claro que en la interpretación de las leyes entra en juego la subjetividad, como en todo. Así, nada más ser nombrado como responsable del juicio del 11-M, lo primero que ha hecho es añadir a la lista de comparecientes a tres etarras. Por cierto, ¡oh casualidad!, en la instrucción llevada por el juez Del Olmo no aparece en ningún caso una posible complicidad o conexión, por remota que ésta fuera, entre ETA y dicho atentado. Sin embargo, a pesar de lo cual, Gómez Bermúdez se empeña en mantener latente la insidia de la conspiración que la derecha política y sus medios afines han mantenido, a pesar de todas las pruebas en su contra.

No seré yo quien tenga que inmiscuirme en la ideología de los jueces, allá ellos. Lo que si me gustaría es que --como ocurre por ejemplo en Estados Unidos, ese país al que tanto la derecha le gusta colocar como paradigma de la democracia-- los jueces responsables en los órganos de decisión fueran elegidos democráticamente por los ciudadanos. Así, podríamos corregir esa representación ideológica sesgada. Si hubiera sido así, es fácil pensar que el elegido para presidir la Sala de lo Penal no sería el actual y sí otro candidato progresista.

La participación de los ciudadanos –tema importante del que deberíamos ocuparnos más a menudo— no debe remitirse a votar cada cuatro años y menos si es sólo a los parlamentarios.

Salud y República

2 comentarios:

Rafael del Barco Carreras dijo...

EL LIBRO DE LA SEÑORA DEL JUEZ



Rafael del Barco Carreras



No me llama la atención que la señora Elisa Beni, periodista célebre en su casa y la propia Audiencia, escriba un libro. Si la enorme incidencia de la televisión convirtió el impresionante cráneo de su señor marido Don Javier (Fernando Alonso) Gómez Bermúdez en el más célebre durante cuatro meses, impactando, pues ¡a sacarle provecho!. En mi artículo sobre el juicio, tuve más insultos que lectores. Así pues no insistiré sobre un Sistema Judicial que al parecer ya les va bien a la mayoría. Hasta que sufren uno de sus innumerables atropellos, y se desvanece la romántica idea que la Justicia existe, pasándose a despotricar, y descubriendo que no tenía ni idea de cosas tan simples como que ese presidente de la Sala, y todos los presidentes de Sala, son amigos de sus colegas (y si son enemigos puede que sea peor) con quien juzgarán transformándose en una sola voluntad e intereses. Nunca me hizo gracia el chascarrillo; una Sala la componen, el presidente, el ponente y el durmiente. Y lo único que se le ocurre ante el libro al ofendido compañero de Tribunal es invocar la amistad.

“La soledad del juzgador”, sí, un solo hombre decide miles de años de cárcel y sobre el dolor y sentimientos de las familias de las víctimas. La sentencia, ni bien ni mal, otro producto del Sistema. Un sistema surgido de siglos de dictadura, lejano a cualquier concepto democrático. Y a la AMIGOCRACIA se une la ENDOGAMIA, siempre unidas cuando el cotarro y presupuesto público se reparte por oscuros caminos, la señora Gómez aporta a la economía doméstica otro sueldo oficial de la propia (de posesión) Justicia.

La sentencia se construiría entre una jefa de prensa, una sociedad mercantil para el provecho posterior, y al aire que dictaran los medios, contentando a los más (en definitiva posibles compradores del libro) que ya decidieron la culpabilidad y hasta quien NO FUE (la ETA) en el juicio paralelo.

Ver…www.lagrancorrupcion.com



Pero a pesar de los insultos, repetiré mi escrito del 4 de julio, recién terminado el juicio. Y aunque me repito por enésima vez en personajes y conceptos, como me aconsejan los ya crecientes lectores y amigos de INTERNET…no importa, la gente se olvida por comodidad… eso de la Justicia, para la mayoría, es cosa de otros, como los accidentes… hasta que le ocurren a uno.







SOBRE EL “11 M”, Y NUESTRO PECULIAR SISTEMA JUDICIAL.



Por Rafael del Barco Carreras



Tras cuatro meses de juicio, según la Televisión Pública o los medios adictos al Poder, TODAS LAS TELEVISIONES, y el gran Grupo PRISA, no cabe duda de que los acusados son los autores y la teoría de la conspiración un puro derrame cerebral o pataleta de los del Partido Popular, y de leer El Mundo y oír la COPE, ni de lejos se ha probado nada más allá de una cascada de corrupciones policiales acusando a sus propios confidentes, pruebas prefabricadas o amañadas en el inframundo del tráfico del hachís, hilvanando una novela. Se podría afirmar que si los tres jueces, o SOLAMENTE DOS, se decantaran por una u otra de las ideologías que “parece” conforman las fuerzas políticas españolas, los acusados saldrían condenados o libres. Y si nos atenemos a la visible politización de los medios jurídicos y hasta diría de la “profesión jurídica” en todos sus campos y especialidades, jueces, fiscales y abogados, dándose la paradoja, que generalizando, el Régimen es dominado en un curioso y abusivo porcentaje, lejos de la mayoría de las demás “democracias”, por los “abogados”, decantarse por una u otra opción, transformando las pruebas EN DOGMA DE FE POR SU REAL SOBERANÍA, es más una interesada arbitrariedad que sentido de Justicia. Y lo que podría provocar el dominio de una “escuela” en cuanto su aplicación de “doctrina y leyes”, no crea más que un caos “controlado” por oscuros intereses, donde otro de los “negocios” la eternización, enfeudando al cliente y la sociedad a un estamento “profesional”.

Para quien como yo sufrió el Sistema, descubriendo a través de veinte años, además de la “total corrupción” de quienes me acusaban los “socialistas barceloneses” de “Serra y Maragall”, en perfecta o interesada asociación con los De la Rosa y la íntima relación de sus abogados Juan Piqué Vidal y Rafael Jiménez de Parga con el mío Luis Pascual Estevill, de tan corrompida idiosincrasia que los dos grupos, cada uno por su lado, unos con FILESA O TIME EXPORT, chantajearon o extorsionaron a empresarios (puede que hasta a De la Rosa), y según la prensa “los primeros espadas en la abogacía barcelonesa” lo hicieran con sus “clientes empresarios”, dudo muy mucho de ese y cualquier juicio donde se litigue con grandes intereses gubernamentales de por medio (y en los otros tampoco por su gran número y farragosas instrucciones). Y puesto que en cualquiera de los “grandes temas” se involucran siempre intereses de “gobierno y partido” porque legal y burocráticamente el Gobierno y Estado lo envuelve absolutamente TODO, tanto lo estrictamente legal como por la enorme corrupción el mundo del delito, donde abarcaríamos desde la muy rentable “doble contabilidad”, delito fiscal, hasta la droga o prostitución, ¿DIEZ, VEINTE, TREINTA, o los que sean, BILLONES de las antiguas pesetas al año?, TODO ES POSIBLE. Y en España no hay MAFIA que triunfe de no incardinarse, o simplemente creada en el “mundo funcionarial-político”. Lo saben bien mafiosos franceses e italianos (invadiendo España tras la muerte de Franco), primero, y del Este y sudamericanos después, que sufrieron la “efectividad policial española”, al actuar por “libre”. Conocí a muchos de ellos en la cárcel.

Cualquier abogado, casi todos, coinciden en la respuesta de que otros SISTEMAS, democráticos, de elecciones directas de fiscales y hasta jueces o policías, de jurados mixtos o total, de doble instancia sin paliativos (donde los jueces son más árbitros que reyes de Taifa), de división ABSOLUTA de los poderes Legislativo, Ejecutivo y Judicial, también son susceptibles de CORRUPCIÓN Y ERRORES JUDICIALES. Pero los demás no van contra dirección, somos nosotros, y Manuel Jiménez de Parga (fundador y socio del bufete con su hermano Rafael, a los que no les molestó la Ética, Moral y Reglamento Profesional al actuar de acusador cuando los hechos involucraban a sus también clientes Banesto, Garriga y De la Rosa), un interesado demagogo cuando como Presidente del Tribunal Constitucional, a la condena de la ONU contra España por incumplimiento de La Carta de Derechos Humanos en cuanto a la sustitución de la DOBLE INSTANCIA por los complejos recursos al SUPREMO, solo se le ocurrió que la ONU no tenía jurisdicción, y que nuestro Sistema garantizaba los derechos del justiciable.

En mi caso no garantizó nada (hasta se perdió un recurso al Supremo, tirado a la papelera por una mujer de la limpieza, publicado por El País en f. 8-3-83), y por lo vivido en la cárcel, el Sistema solo garantiza que la marcha atrás en cualquier error sea más que imposible y embarullado de no interceder la GRAN ARBITRARIEDAD de los jueces y su pirámide burocrática de Poder. Un triste ejemplo los dos marroquíes violadores que por los 93 conocí en la enfermería de Brians (yo trabajando para redimir al máximo y ellos “aislados” por seguridad), tan desorientados que rezaban cara a Madrid en lugar de La Meca, y que al advertírselo se convirtieron en amigos míos, uno muerto en prisión y otro liberado QUINCE AÑOS DESPUÉS, ya cumplida la condena, cuando el ADN, detenido el verdadero violador, demostró que de algunas de las violaciones de que fueron acusados no eran los autores. Y a la Prensa, justificando, solo se le ocurre publicar que se “parecían”, para su desgracia NADA más allá que la vulgaridad de rostros de la “perra vida”.

Figurarse una Sala de Justicia con Luis Pascual Estevill (que ni de lejos es un “caso aislado” como predicaba el ínclito Fiscal Jefe Vitalicio de Barcelona, José María Mena, uña, carne y sucesor del gran Carlos Jiménez Villarejo, los dos declarados de “izquierdas” del PSUC) y amiguetes…y en el Supremo otros de la cuerda…!Da vértigo!...y le puede suceder a cualquiera…en ese orden de cosas transitamos por tan viejas carreteras, reconstruidas y perfeccionadas en el refinado franquismo, que los accidentes ante la masiva circulación actual…son MASIVOS, y siempre atribuidos a fallos del conductor víctima…

Si la corrupción marbellí ha comportado NOVENTA Y PICO DETENIDOS E INVOLUCRADOS (y aun faltan de más arriba), y EN BARCELONA SE DETUVO Y RETUVO A TRES de escasa o nula incidencia en el gran desfalco…ALGO FALLA MASIVAMENTE EN NUESTRO SISTEMA…más allá de los lógicos fallos humanos…

Y para detalles consultar www.elconsorcio.net donde encontrarán casi todo mi libro no editado “Barcelona 30 años de corrupción”.

Anónimo dijo...

Ya ves, Rafael.

El juez Gómez Bermudez, a quién seguí detalladamente el el juicio del 11-m, me pareció un buen juez.

Luego se fue todo a hacer puñetas con el librito de su mujer.

Despues, como colofón y de momento, firmó un manifiesto con otros jueces que le vino muy mal al PP.

La vida te da sorpresas. Sorpresas te da la vida.